¿Sabías que solo un pequeño porcentaje de la población vive este asombroso fenómeno? ¡Así es, a estas personas se les puede erizar la piel al escuchar una buena canción! Si tú eres una de ellas o conoces a alguien, este artículo podría interesarte, ya que un estudio revela que estas personas tienen un cerebro más singular que el promedio, y aquí te explicaremos por qué.
Aunque muchos melómanos (amantes de la música) experimentamos emociones al escuchar nuestros géneros y artistas favoritos, solo unos pocos viven la sensación de tener la piel erizada. Estas personas, a las que podríamos denominar “ultraperceptivas”, sienten la música profundamente cuando escuchan sus melodías predilectas.
Matthew Sachs, un exalumno de la Universidad de Harvard, llevó a cabo un estudio sobre sujetos que experimentaban escalofríos e incluso una sensación de nudo en la garganta al escuchar una buena canción. Para ello, Sachs analizó a 20 estudiantes, de los cuales 10 experimentaban estas emociones, mientras que los otros 10 no.
Después de escanear los cerebros de los 20 participantes, descubrió que aquellos 10 que sentían un fuerte apego emocional y físico hacia la música presentaban estructuras cerebrales diferentes en comparación con los demás. Esto lo interpretó como “una conexión más directa entre el cerebro y la música”, como si las fibras que conectan la corteza auditiva y las áreas del cerebro responsables de procesar emociones tuvieran una comunicación más fluida que en las personas promedio.
Aunque el estudio de Sachs fue limitado al analizar solo a 20 personas, sin duda representó una investigación intrigante que abrirá la puerta a nuevos análisis con un número mayor de participantes. Entre sus planes está el de investigar las causas neurológicas detrás de este fenómeno y explorar si podría ser utilizado en tratamientos de musicoterapia para pacientes con trastornos de salud mental.
¿Conoces a alguien que sienta esto o tú misma experimentas piel chinita al escuchar música? No solo eres especial, sino que también podrías considerar dedicarte a ser curadora musical, aprovechando ese talento único que tienes.