Los diabéticos pueden contar con una alternativa a las inyecciones de insulina, que en ocasiones deben administrarse hasta cuatro veces al día y provocan dolor e incluso hematomas en diversas partes del cuerpo.
En Brasil, la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) tiene un medicamento llamado fresca. La insulina se inhala a través de un pequeño dispositivo que puede llevarse a casi cualquier lugar y administrarse al comienzo de las comidas.
Según los desarrolladores de la iniciativa, Biomm y MannKind, esta versión podría ahorrarles a los pacientes hasta mil pinchazos de aguja al año.
Esta modalidad de insulina puede ser utilizada por adultos con diabetes tipo 1 o tipo 2 que necesitan medicamentos de acción rápida, que desean omitir las inyecciones a la hora de las comidas y que no tienen ningún problema pulmonar como EPOC o asma, o que han dejado de fumar desde 2016 en menos seis Meses.
Correspondiente Organización Mundial de la Salud, el número de personas con diabetes en todo el mundo aumentó de 108 millones en 1980 a 422 millones en 2014; La prevalencia de la enfermedad ha aumentado, particularmente en países de ingresos bajos y medianos como los de América Latina.
La diabetes provoca problemas como ceguera, insuficiencia renal, infarto de miocardio, accidentes cerebrovasculares y amputación de miembros inferiores, entre otros, además de provocar un gran número de muertes.
Para tratarlos, para evitar o retrasar sus consecuencias, es importante tener una dieta equilibrada para contrarrestar los factores de riesgo, actividad física y exámenes periódicos para identificarlos o, si es necesario, tratarlos con medicamentos.