Si eres de esas personas que se sonroja como un tomate, tienes una gran virtud y la ciencia lo dice. A aprender publicado en el Journal of Personality and Social Psychology informa: «Aquellos que muestran mayores signos de vergüenza ante una experiencia desagradable son más dignos de confianza a los ojos de los demás».
El rubor es una respuesta natural e involuntaria del cuerpo y se produce porque el cuerpo libera adrenalina lo que hace que las venas faciales se dilaten y fluya más sangre. Charles Darwin definió esta reacción como «la más humana de todas las expresiones».
Tras analizar a 60 personas, investigadores de la Universidad de Berkeley (California) llegaron a la siguiente conclusión:
- Las personas que se sonrojan tienden a hacer amigos más fácilmente.
- Este signo de «vergüenza» es percibido por los demás como «empatía», algo que inspira confianza.
- El rubor es un rasgo de alguien que es muy sensible.
El miedo a sonrojarse
Hay casos en que sonrojarse en público hace que una persona entre en pánico; Este miedo se llama eritrofobia. Cuando alguien padece esta condición, reacciona negativamente, se siente avergonzado y experimenta una ansiedad excesiva que hace que se sonroje más.
Las causas de la eritrofobia son:
- miedo a la crítica
- Miedo a ser menospreciado o humillado por la gente.
Un estudio de la Universidad de Braunschweig (Alemania) comparó la frecuencia con la que se produce el rubor intenso en diferentes partes del mundo y concluyó que los países con más casos de rubor se dan de más a menos:
- Japón.
- Corea.
- España.
- Alemania.
- Australia.
- Canadá.
- Holanda.
- ESTADOS UNIDOS DE AMERICA.