Una nueva controversia afecta a Kanye West, o mejor dicho, al rapero y productor estadounidense conocido ahora como Ye, quien ha estado en el centro de atención por una serie de episodios polémicos en las últimas semanas.
Después de que el artista de 45 años lanzara una línea de ropa con la frase “White Lives Matters” (“Las vidas blancas importan”) en lo que se interpretó como una burla al movimiento antirracismo Black Lives Matter (Las vidas negras importan), y sus declaraciones en contra de la comunidad judía, Adidas decidió cortar de inmediato sus lazos con el intérprete de «Stronger», también siguiendo el ejemplo de Balenciaga.
El 25 de octubre, la marca alemana de ropa deportiva emitió un comunicado oficial anunciando la ruptura comercial con Kanye West:
Adidas no tolera el antisemitismo ni ningún tipo de discurso de odio. Las acciones y comentarios recientes de Ye han sido inaceptables, odiosos y peligrosos, y vulneran los valores corporativos de diversidad e inclusión, respeto mutuo y equidad.
Asimismo, Adidas anunció que estima que la finalización de la sociedad con Yeezy (la marca de Kanye) afectará negativamente las ganancias netas de la empresa en 2022, con un impacto estimado de 250 millones de dólares, aunque espera que la caída sea temporal.
Con la ruptura de la relación comercial entre el rapero y la compañía deportiva, se han suspendido las ventas y la producción de los productos Yeezy, así como los pagos a sus empresas.
Adidas inició su colaboración con Kanye West en 2013. Tres años después, la compañía alemana firmó un contrato con él para la producción y distribución de productos de su línea de moda.
Es importante señalar que Adidas había mencionado previamente que la asociación con Kanye representaba un impacto significativo en las operaciones comerciales de la marca, al ser una de las relaciones más exitosas en su historia.
Sin embargo, en los últimos meses, el ex de Kim Kardashian ha estado criticando públicamente a la compañía, así como a otras marcas importantes con las que mantiene acuerdos comerciales, incluida Gap.
Recientemente, Ye comentó a CNBC que Adidas copia sus ideas. Además, ha expresado sus quejas sobre la marca en las redes sociales, especialmente en lo que respecta al director ejecutivo Kasper Rorsted y otros miembros del equipo directivo.
Si otras marcas siguieran las políticas de Balenciaga y Adidas, la situación se vería complicada para Kanye, quien, según el portal estadounidense TMZ, habría recurrido al prestigioso bufete de abogados Brown Rudnick, que incluye a Camille Vásquez, la abogada de Johnny Depp en su juicio contra Amber Heard, para gestionar sus “intereses” tras las recientes rupturas comerciales.
