Han transcurrido cinco meses desde que Chris Rock fue abofeteado por Will Smith durante la ceremonia de los Óscar, como resultado de una broma sobre la alopecia que afecta a la esposa del actor de Soy leyenda, Jada Pinkett Smith.
Un suceso que sin duda quedará grabado en la historia del cine y, por supuesto, en la memoria del comediante estadounidense de 57 años, quien en su más reciente espectáculo de stand up, llamado Ego Death, en Phoenix, Arizona, generó controversia al compartir que recibió una invitación de la Academia para presentar la próxima entrega de los premios, en 2023.
Chris reveló que rechazó la oferta de inmediato, comparando su posible regreso al escenario del Dolby Theatre en Los Ángeles, California, con volver “a la escena del crimen”.
Continuando con el tema, durante su show, Chris se dejó llevar por el humor, ya que, según reporta The Arizona Republic, el comediante mencionó el caso de O. J. Simpson, el exjugador de fútbol americano que fue acusado de asesinar a su exesposa Nicole Brown en 1994.
Chris Rock comentó que volver a los Óscar sería como pedirle a Nicole que “regrese al restaurante” donde dejó sus anteojos antes de su asesinato. Este comentario ha sido considerado de mal gusto por muchos y ha causado revuelo en el mundo del espectáculo y en redes sociales.
La hermana de Nicole, Tanya Brown, criticó al comediante por su broma “más que desagradable”. Tanya utilizó Instagram para expresar su desaprobación después de que Chris incluyó el asesinato de su hermana en su rutina de comedia.
En mayo pasado, en una entrevista para Deadline, Craig Erwich, presidente de entretenimiento de ABC, manifestó su interés en ver a Chris regresar como presentador de los Óscar en 2023. El artista ha conducido la ceremonia en otras dos ocasiones, en 2005 y 2016.
No obstante, a raíz de sus recientes comentarios, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas no ha emitido ninguna declaración al respecto. Según Los Ángeles Times, la organización generalmente no revela sus discusiones con posibles anfitriones y es probable que no designen a un maestro de ceremonias para el evento del próximo año, programado para el 12 de marzo, hasta que se acerque la fecha.