El deseo puede llevar al éxito, y aunque esta afirmación puede parecer un cliché, la historia de Luis Gerardo, un joven originario de Reynosa, Tamaulipas, México, demuestra su verdad. A continuación, les contamos por qué.
Luis Gerardo es un joven que durante un tiempo trabajó como limpiaparabrisas. A menudo se piensa erróneamente que la mayoría de los jóvenes que ejercen esta actividad lo hacen para financiar adicciones, pero Luis es la excepción que comprueba la regla, ya que su esfuerzo fue dirigido a pagar su educación, convirtiéndose en un ingeniero titulado.
De acuerdo con su publicación en Facebook, Luis dedicó su tiempo a limpiar vidrios en cruceros y gasolineras. A pesar de haber enfrentado insultos y malos tratos, también recibió apoyo y consejos de personas que se cruzaron en su camino, por los cuales se siente agradecido.
Además, el joven hizo hincapié en que no todos los jóvenes que lavan parabrisas son adictos o delinquen; él es una clara demostración de que hay quienes luchan por salir adelante y alcanzar sus sueños.
Por otro lado, Luis expresó su orgullo por su logro y agradeció a todas las personas que lo apoyaron y lo vieron esforzarse día a día. También les recordó a sus amigos que “cuando se quiere, se puede”, siendo él un claro testimonio de ello.
Hoy comparto mi logro como una forma de agradecer a quienes me apoyaron y me observaron esforzarme continuamente. Asimismo, es un mensaje motivador para aquellos que anhelan alcanzar sus sueños y metas en la vida: todo es posible. Porque querer es poder.
Así fue como Luis Gerardo compartió en su perfil el título que obtuvo como ingeniero del Instituto Tecnológico de Ciudad Victoria, Tamaulipas, generando admiración entre los internautas, quienes no dudaron en felicitarlo.