La nadadora artística estadounidense Anita Álvarez, quien fue rescatada por su entrenadora del fondo de la piscina tras desmayarse durante su rutina en solitario, no pudo participar en la final de natación artística en el Campeonato Mundial de Budapest, Hungría, del 24 de junio, debido a la solicitud de la Federación Internacional de Natación (FINA).
Según el Daily Mail, aunque Anita, de 25 años, esperaba competir en la final y se preparaba para el evento dos días después del incidente en la piscina, la organización la excluyó solo unas horas antes del evento al determinar que no era seguro que continuara en la competencia.
En un comunicado oficial, la FINA expresó lo siguiente:
La salud y la seguridad de los atletas siempre deben ser prioritarias. Aunque la FINA comprende que la decisión es frustrante para la atleta, fue tomada considerando su mejor interés. El organismo está satisfecho con la recuperación de Anita Álvarez y espera verla pronto en la competencia.
No obstante, según AFP, la doctora del equipo estadounidense, Selina Shah, afirmó que estaba “muy segura” de que Anita podría competir en la final:
En mi opinión, podría haber competido, tengo plena confianza. Proporcioné toda la evidencia médica de Anita. No estoy al tanto de su proceso de toma de decisiones.
El 23 de junio, el equipo de natación artística de Estados Unidos emitió un comunicado indicando que Anita se había desmayado debido a su esfuerzo durante la rutina. Sin embargo, Selina Shah mencionó que los médicos seguían buscando una explicación definitiva:
Vamos a investigar lo que ocurrió y realizar programas adicionales con consultores para determinar una causa real.
Hasta el momento, ni Anita Álvarez ni Andrea Fuentes han comentado sobre la exclusión de su participación en la final del Campeonato Mundial de Budapest.