Lamentablemente, las alergias son una realidad para muchas personas. Ya sea por polen o por ciertos alimentos, todos estamos familiarizados con los alérgenos más comunes que causan molestias.
No obstante, hay alergias tan inusuales y sorprendentes que parecen sacadas de la ficción. Por ejemplo, ¿te has enterado de la “alergia a la gravedad”?
Lyndsi Johnson, una joven de 28 años de Maine, Estados Unidos, se define como “alérgica a la gravedad” debido a una extraña condición que le provoca múltiples síntomas, incluyendo desmayos varias veces al día. Se ha dirigido a las redes sociales para concienciar y compartir su experiencia con una enfermedad muy poco frecuente.
Experiencias de dolores de cabeza intensos, mareos, sudoración fría, agotamiento extremo, desmayos y parálisis facial son parte de su día a día, todos síntomas relacionados con el síndrome de taquicardia ortostática postural (POTS), la enfermedad crónica que ella padece. Para Lyndsi, es casi imposible estar de pie durante más de diez minutos sin perder el conocimiento, lo que para ella es una especie de “alergia a la gravedad”.
Mientras esté en posición horizontal, el dolor es manejable, pero si me mantengo erguida demasiado tiempo, el dolor se intensifica.
– Lyndsi Johnson, en su cuenta personal de Instagram
De acuerdo con The Independent, después de terminar la escuela secundaria, Lyndsi cumplió su sueño al unirse a la Marina, donde trabajaba como mecánica diésel de aviación.
Sin embargo, en octubre de 2015 comenzó a experimentar dolores abdominales y de espalda, lo que dificultaba cada vez más su trabajo, obligándola a dejar el ejército tras ser diagnosticada con POTS tres años más tarde.
Según The Daily Mail, gracias a la medicación, sus desmayos se han vuelto menos frecuentes, aunque otros síntomas continúan presentes, lo que le dificulta realizar muchas de sus tareas diarias. Esto hace que dependa de su esposo, James, y de un cuidador que le ayuda en su día a día.
Ya no puedo salir de casa. No hay cura, pero estoy muy agradecida por James y por lo que tengo.
Lyndsi ha aprendido a vivir con su enfermedad y espera mudarse de su apartamento a una casa donde pueda disfrutar más del aire libre.
Para ella, se trata de no dejar que su condición controle su vida. Actualmente está estudiando para trabajar en la industria musical y también persigue su pasión por el maquillaje artístico.
Ahora me toma entre una y seis horas en maquillarme, pero estoy muy agradecida de que aún puedo hacerlo.