Tras ocho intensas y exhaustivas semanas, la segunda temporada de Euphoria ha llegado a su fin. Si bien se abordaron algunas de nuestras inquietudes de la primera temporada, se dejaron de lado otros aspectos y surgieron nuevas preguntas que probablemente se resolverán en la tercera temporada, confirmada para 2024.
Sin duda, lo que cautiva a los espectadores de Euphoria es la profunda imperfección de cada uno de sus personajes. Aunque sus vidas caóticas pueden parecer escandalosas, reflejan la realidad que enfrenta la juventud en la actualidad; por lo tanto, al analizarlo, es evidente que los problemas que enfrentan no son tan descabellados.
Al igual que en la primera temporada, la segunda se caracterizó por un torbellino de altibajos, con algunos personajes tomando el protagonismo mientras que otros se mantuvieron en el fondo. Reconocemos que algunas de sus acciones fueron comprensibles; sin embargo, otras nos dejaron confundidos. Por lo tanto, mientras reflexionamos sobre quién hizo qué y cómo afectó a los demás, examinemos a todos los personajes clave, evaluando su desenlace en la segunda temporada, del más querido al más odiado.
1. Maddy Perez
Maddy es noble, auténtica y real; su mayor defecto tal vez sea haberse enamorado del chico equivocado. Fuera de eso, es ferozmente leal, organizada y determinada a conseguir sus objetivos. Aunque algunos la etiquetan como materialista, ha demostrado ser mucho más inteligente de lo que parece.
El inconveniente es que Nate es su talón de Aquiles, una realidad que vimos en la primera temporada cuando se quedó sin hacer nada mientras él devastaba la vida de personas inocentes, como Tyler. Aunque se la puede ver como una espectadora de las fechorías de Nate, también ha sido su principal víctima, soportando su abuso durante mucho tiempo.
En la segunda temporada, Maddy tampoco lo tuvo fácil. Aunque terminó su relación con Nate tras sus inaceptables acciones, continuó siendo psicológicamente torturada por él, quien incluso la amenazó con un arma. Además, tuvo que descubrir que su supuesta «mejor amiga», Cassie, en quien había confiado durante años, estaba saliendo con él a sus espaldas. Afortunadamente, Maddy finalmente se libera de la influencia tóxica de Nate y se lo hace pagar, estando casi segura de que nunca volverá a considerar a Cassie como una amiga.
2. Fezco
¡El dulce y apreciado Fez! Conocer su historia en el primer episodio de la segunda temporada lo hizo ascender rápidamente en la lista de favoritos. A pesar de su irónico papel como vendedor de drogas a Rue y otros miembros del grupo, él es sin duda el alma más pura y noble. Se preocupa genuinamente por el problema de adicción de Rue, llegando a negarse a venderle en ciertas ocasiones y hasta pagó deudas con mafiosos para mantenerla a salvo. A su manera, se preocupa por los demás.
En su episodio especial, descubrimos que literalmente abandonó la escuela para vender drogas para su abuela, y aunque no tuvo la mejor vida, eso no le impidió ser una persona decente que desea la felicidad de todos. Además, golpear a Nate en la cara posiblemente causó más ovaciones que un estreno de Marvel.
3. Lexi Howard
Es sorprendente que Lexi, a pesar de su papel crucial en la vida de Rue y su hermana Cassie, no tuvo un episodio con flashbacks dedicado a ella en la primera temporada. Lexi ha demostrado ser una amiga leal y siempre ha estado ahí para Rue, incluso estuvo dispuesta a darle su orina para que pasara una prueba de drogas. Estuvo con ella durante el complicado Halloween y es Lexi quien Rue imagina como su cómplice en la investigación sobre Nate/Jules.
Por suerte, Lexi tuvo más protagonismo en la segunda temporada gracias a su encantador romance con Fezco. Aunque su obra escolar en el capítulo final fue un fiasco, resultó ser el llamado de atención que algunos personajes necesitaban.
4. Gia Bennett
Gia no lucha con las mismas enfermedades mentales que su hermana, pero también sufrió la pérdida de su padre a una edad temprana mientras lidia con la carga de vivir con una hermana que lucha contra la adicción. Al igual que Lexi, Gia se ve inmersa en el drama de su hermana e incluso intentó probar algunas drogas en la primera temporada. No obstante, las experiencias de Rue la golpearon, pues la encontró después de una sobredosis, un trauma que no es fácil de superar. Aun así, Gia apoya a su hermana y espera su recuperación. En la segunda temporada, se centra principalmente en los problemas familiares.
5. Ali Muhammad
Una de las cosas que le falta a Rue es una brújula moral, y ahí es donde Ali juega su papel. Él es el tío sabio que Rue nunca tuvo, quien ve todos sus defectos y la acepta tal como es. Es el único personaje con el que Rue ha sido completamente honesta y la única persona que no proyecta sus propias luchas sobre ella.
Por eso nos molesta su comportamiento hacia él al final del tercer episodio. Todo lo que Ali hizo fue comprenderla en su camino hacia la recuperación y compartir aspectos personales de su vida para crear un vínculo. Así que resulta lamentable que Rue le haya recordado cosas delicadas de su pasado, cuando él le pregunta sobre su maleta llena de drogas en una reunión de rehabilitación.
Ali es uno de los pocos personajes que ha enfrentado sus demonios y ha luchado contra ellos, aconsejando a otros sobre cómo hacerlo. Aunque no es perfecto, nadie lo es y es en sus imperfecciones donde ha encontrado su equilibrio. Cada día navega por el mundo lidiando con sus propias adicciones. Rue es solo una adolescente y a veces le cuesta comprenderlo, pero esto no la excusa para haberle dado la espalda a la única persona que siempre la apoyó.
6. Rue Bennett
Como protagonista y narradora de la serie, estamos destinados a apoyar a Rue. Y en gran medida, eso es lo que hacemos. Desde el inicio, se percibe que lucha con problemas de adicción y, a través de sus tiernas escenas con Jules, es evidente que tiene un gran amor que ofrecer. Sin embargo, resulta complicado cuando parece empeñarse en su propia autodestrucción. A pesar de nuestro deseo de apoyarla, a veces nos lo pone muy difícil.
Perder a su padre de joven y lidiar con problemas de salud mental, como ser bipolar y sufrir ansiedad y depresión, han creado un ambiente complicado donde ni su madre, Leslie, ni su hermana, Gia, pueden lidiar con ella. Verla salir de rehabilitación solo para volver a las drogas es una representación precisa de la realidad que enfrentan muchas personas y familias, pero eso no hace que sea más fácil de observar en televisión, especialmente considerando que Rue sigue siendo una adolescente.
Es evidente que su relación con las drogas es oscura, desordenada y complicada, lejos de la «glorificación» de la que hablan. Su inclinación a autodestruirse y herir a quienes la quieren expone sus defectos y deja en claro que tiene un largo camino por recorrer antes de convertirse en la persona que tiene potencial de ser. Esto hace que su decadencia y sus recaídas sean aún más dolorosas de observar.
7. Jules Vaughn
Jules es uno de esos personajes con los que es difícil decidirse; incluso algunos fanáticos la ven como una especie de villana. Aunque no podemos olvidar su participación en el encarcelamiento de Tyler, también sabemos que fue chantajeada y no tuvo más opción. A pesar de haber roto nuestros corazones en la primera temporada al dejar a Rue en la estación de tren, en la segunda temporada descubrimos que su vida es mucho más compleja de lo que parecía, pues ha lidiado con un padre adicto durante gran parte de su vida.
Se le debe reconocer que es auténticamente ella misma, sin importar la opinión de los demás. De hecho, fue clara con Rue, dejando en claro que no podía corresponder a sus sentimientos por completo. Sin embargo, la presión de ser el único freno de Rue a la recaída es un gran peso, especialmente para una adolescente.
En la segunda temporada, la balanza se inclina un poco hacia lo negativo para Jules debido a sus interacciones con Elliot y la repercusión que esto tuvo en su relación con Rue, aunque también actuó correctamente al avisar a Leslie, la madre de Rue, sobre la recaída de su hija. Después de todo, a Jules le vendría bien un tiempo para encontrarse a sí misma. ¿No lo crees?
8. Cassie Howard
En la primera temporada de Euphoria, Cassie fue uno de los personajes más queridos. A pesar de sus defectos evidentes, sus vulnerabilidades e inseguridades nos hicieron empatizar con ella. Todos deseábamos que Cassie encontrara el amor y la seguridad que tanto anhelaba, y la escena de su aborto sigue siendo una de las más impactantes de la serie.
No obstante, Cassie tomó decisiones lamentablemente equivocadas en el estreno de la segunda temporada. Subirse a un coche con el exnovio de su mejor amiga, Maddy, y tener relaciones sexuales con él fue un error grave. Aunque logró salirse con la suya, jugar con Nate raramente termina bien. Traicionar a su amiga es una cosa, pero traicionarse a sí misma es otra. Cassie presenció lo mal que Nate trataba a Maddy y a los demás, entonces, ¿qué le hizo pensar que él la trataría de una manera diferente?
Cuando Rue le revela a Maddy lo que su mejor amiga ha estado haciendo con Nate, Cassie inicialmente lo niega y empieza a llorar. Sin embargo, logra escapar antes de que Maddy desate su ira sobre ella. Todo el sentimiento de compasión hacia Cassie desaparece cuando parece estar más enfadada porque Nate no la ha contactado que por haber herido y perdido a su mejor amiga. A pesar de parecer dulce, inocente y vulnerable, traicionar a tu mejor amiga de esa forma y a ese nivel es realmente imperdonable.
9. Nate Jacobs
Si Nate tiene un millón de detractores, yo soy una de ellos. Si tiene una crítica, soy yo. Aunque algunos afirman que está luchando con su sexualidad o que el hecho de ser interpretado por el atractivo Jacob Elordi, de alguna manera, lo exime de responsabilidad, la realidad es que es un personaje complejo, oscuro y retorcido, tal vez un espejo de su igualmente retorcido padre, Cal Jacobs.
A lo largo de la serie, no solo lo hemos visto abusar y atacar físicamente a su novia Maddy, dejándola marcada al intentar asfixiarla en la primera temporada y apuntarle con una pistola en la segunda temporada, sino que también ha chantajeado a otros, como a Jules, utilizando videos íntimos de ella y su padre.
Y si esto no fuera suficiente, Nate es grosero, arrogante y pasó toda la primera temporada avergonzando a Cassie antes de darse cuenta de lo manipulable que es. Puede que esté lejos de la trama de las drogas, pero su imagen limpia esconde una gran maldad.
10. Cal Jacobs
No importa cuán malo sea su hijo, Cal es, sin duda, el peor personaje de Euphoria. Es un maestro en ser una mala persona. Cuando lo vimos por primera vez teniendo relaciones con Jules, que es menor de edad, y grabando todo, eso fue suficiente para convertirlo en el personaje más repugnante de la serie. Pero su maldad no terminó ahí; llevó las cosas aún más lejos.
Incluso cuando la serie intentó darle una historia de fondo sincera a su pasado, eso no cambió la opinión del público. Cal se asemeja a Nate de niño en cuanto a que parecía tenerlo todo, pero se vio obligado a ocultar su verdadera sexualidad a un padre abusivo.
Cal es el principal responsable de que su hijo sea tan terrible como él. Cuando Nate descubrió las acciones de su padre, fue la chispa que encendió lo peor de él. Aunque su doble vida se mantiene en secreto con su esposa e hijo mayor, Nate ha sido el más afectado por la vida secreta de su padre, incluso más que Cal, arremetiendo contra quien esté a su alrededor.
