Recientemente, el presidente de España, Pedro Sánchez, presentó su informe de gobierno en el Palacio de Moncloa y realizó un gesto peculiar para quienes no están familiarizados: no usó corbata, simbolizando su nueva propuesta.
En su mensaje, el representante del gobierno instó a funcionarios, empresas y a la ciudadanía en general a suspender el uso de la corbata con el fin de ahorrar energía. Según el mandatario, al dejar de usarla, las personas sentirán menos calor y podrán disminuir el uso del aire acondicionado, lo que podría resultar en un importante ahorro energético.
Antes de concluir, el presidente destacó: «No llevo corbata; esto significa que todos podemos contribuir al ahorro energético. He instado a ministros, responsables públicos y al sector privado a evitar el uso de la corbata siempre que no sea necesario, ya que así ayudamos al ahorro energético tan vital en nuestro país.»
No obstante, la reacción ante esta propuesta fue negativa. El partido de derecha, el Partido Popular, criticó al líder por solicitar esto mientras utilizaba un helicóptero para desplazarse al Palacio. Además, Elías Bendodo, presidente de este partido, sugirió que el mandatario intenta desviar la atención de los ciudadanos ante el reciente incremento de la inflación, que pone de manifiesto los problemas económicos del país.
Se ha reportado que los precios de la energía eléctrica en España han aumentado en los últimos meses, en gran medida por la ola de calor que alcanzó hasta los 47.5 grados centígrados.
Por otro lado, Eduardo Zamácola, presidente de la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel, declaró que la industria textil ha sufrido gravemente por la pandemia, y este tipo de recomendaciones podría llevar al cierre de negocios y a la pérdida de empleos.