Como todas sabemos, con el inminente estreno de su live-action, la popularidad de Barbie está en su punto más alto y una de las cosas que a todas las niñas que fuimos fanáticas de esta icónica muñeca nos ha hecho recordar es la gran diversidad que ha implementado desde hace muchos años.
Es decir, todas las niñas del mundo podían verse reflejadas en Barbie, ya que, a pesar de su característica cabellera rubia y tono de piel claro, existían modelos que representaban a prácticamente todas las razas.
A diferencia de las princesas de Disney, cuyo lanzamiento de Tiana como protagonista de la película «La Princesa y el Sapo» sucedió en 2009, Barbie ya había dado un paso inclusivo en 1969 al presentar su primer modelo afroamericano, conocido como Christie, quien se convirtió en una de las más cercanas amigas de la clásica Barbie.
Recientemente, en la película de Greta Gerwig, la actriz Issa Rae interpretará a la Barbie presidenta. De esta manera, la cineasta nos lleva a Barbieland, un lugar donde la inclusión es una realidad y el racismo no tiene lugar.
Recientemente, se volvió viral la historia de Anne Bellize, una niña de 11 años de Nova Brasilia, Río de Janeiro, Brasil, quien no se sentía representada por la muñeca original debido a su piel morena y su tipo de cabello.
No obstante, su perspectiva cambió cuando recibió una muñeca que coincidia con el color de su piel y el tipo de su cabello, lo que la deslumbró y la llevó a no solo jugar con su nueva muñeca, sino también a verse a sí misma como una fuente de empoderamiento frente a la problemática racista actual.
Para conmemorar este importante momento, Anne decidió disfrazarse de su muñeca favorita y realizó una sesión de fotos como una Barbie afrodescendiente. Así, demostró a su país y al mundo que la belleza no se limita a un solo color de piel, ni a la estatura, el peso o el tipo de cabello.
Este acontecimiento se volvió tan popular en las redes sociales que, en su país natal, ha recibido gran acogida e incluso canales de televisión y periódicos brasileños han destacado la original y creativa idea de Anne y de la fotógrafa Aquino.
Además, la madre de Anne, Vanessa de Santos Ferreira de Souza, decidió personalizar los cuadernos de clase de su hija con las fotos tomadas de esa sesión, lo cual generó numerosos comentarios positivos, recibiendo una aprobación unánime.
Así como Anne, a lo largo de 64 años, miles de niñas en todo el mundo han podido sentirse incluidas en el universo de Barbie.
