Un abuelo italiano de 90 años ha demostrado que la edad no debe ser un obstáculo para alcanzar nuestros sueños. A menudo, las personas tienden a rendirse por el miedo al qué dirán o por sentirse ridículas al intentar emprender nuevos caminos cuando creen haber pasado el tiempo adecuado para hacerlo.
No obstante, este ancianito no se dejó vencer por sus temores y retomó con entusiasmo el camino del estudio. Según informa el medio italiano Rai News, el hombre persistió hasta alcanzar su meta y finalmente cumplió su sueño de graduarse como doctor en Derecho.
Óscar Mattei es un alegre abuelo que mima a sus nueve nietos, hijos de sus cuatro hijos. Durante su vida laboral, trabajó incansablemente para sacar a su familia adelante. Se desempeñó como sastre, vendedor de libros e incluso, en algún momento, vendió dulces y refrescos, pero había un sueño que había guardado “para después” en algún rincón de su corazón.
A los 85 años, vio la oportunidad de cumplir su sueño y esta vez no la dejó pasar. Sin dudarlo, se inscribió en la Universidad de Roma, ya que siempre había anhelado convertirse en un doctor en Derecho.
Sus esfuerzos y sacrificios dieron sus frutos, ya que logró graduarse con honores, convirtiéndose en uno de los estudiantes más destacados con una calificación de 100/110, una de las más altas en la Universidad de Roma.
Los profesores que tuvo en la universidad elogiaron su determinación y esfuerzo. Incluso el rector de la institución educativa tuvo excelentes comentarios para él, describiéndolo como un estudiante ejemplar.
Todos mis compañeros, mucho más jóvenes que yo, quedaron sorprendidos por mi energía y mis ganas de seguir adelante.
Sin embargo, este logro representaba para él solo una parte de su objetivo, ya que también quería mostrar a sus descendientes la importancia de nunca rendirse.
Quiero que vean y, sobre todo, comprendan que hay que vivir la vida, que nunca es demasiado tarde para alcanzar tus sueños y que, cuando realmente te esfuerzas por perseguirlos, la vida misma te recompensa.
Si tienes algún sueño que aún no has concretado, esperamos que su historia te inspire a actuar, porque para lograr cualquier meta es necesario hacer sacrificios y, sobre todo, atrevernos a dar ese primer paso.