En la madrugada del 11 de agosto de 2020, Rusia registró su vacuna contra el Covid-19, desarrollada por el Instituto de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya de Moscú, la cual sabemos ha sido un éxito rotundo en sus últimas pruebas en humanos; fue Vladimir Putin, el presidente de este país, quien lo anunció durante un programa en la televisión estatal.
El mandatario aseguró que la vacuna había pasado todos los controles necesarios y fue bautizada como «Sputnik V», mientras que el titular del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) informó que se han recibido solicitudes de más de 20 países para que se les permita importar la vacuna. Vacuna equivalente a aproximadamente mil millones de dosis hasta la fecha.
La vacuna se distribuirá a la población rusa esta semana, por lo que se espera que la campaña de vacunación masiva comience en octubre y, al menos en Rusia, los médicos y maestros serán los primeros en recibir el fármaco.
El ministro de Salud de Rusia, Mijaíl Murashko, confirmó que en el territorio nacional, los costos incurridos en la fabricación, distribución y uso del medicamento serán sufragados íntegramente por el Estado.
Por otro lado, a diferencia del laboratorio inglés AstraZeneka, que aún se encuentra en la fase III de pruebas, la distribución y compra de la vacuna no será gratuita para territorios extranjeros, ya que se necesitarán unos 100 mil millones de dólares para comprarla en todo el mundo, un presupuesto de los cuales, según la Aceleradora de Acceso a Herramientas Covid-19 (ACT), solo están disponibles el 10 por ciento.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) creó el Proyecto ACT para ayudar a fabricar vacunas, apoyar hospitales y entregar suministros a todos los países del mundo con fondos económicos proporcionados por los mismos gobiernos y fundaciones, que quieren apoyarlo; Sin embargo, gran parte de este presupuesto se ha destinado a empresas farmacéuticas para realizar investigaciones sobre vacunas para combatir el Covid-19; Debido a esto, el precio de la vacuna para territorios no rusos es completamente desconocido.
A pesar de las estrictas medidas de seguridad que Rusia ha implementado para evitar que aumenten los contagios en su territorio, Putin agregó que la vacunación será voluntaria, al menos en su país, y confía en que otros gobiernos también estén desarrollando medicamentos efectivos para tratar el virus.
Espero que nuestros colegas en el extranjero también sigan su trabajo y que haya más curas en el mercado de medicamentos y vacunas que puedan usarse.
—Vladimir Putin, presidente de Rusia