Hemos recopilado los errores más frecuentes que cometemos al hacernos la manicura en casa y la solución para cada uno de ellos. ¡Sigue estos consejos y conseguirás un resultado de 10!.
Si eres de las que vas todos los meses a hacerte la manicura en tu centro de belleza de confianza porque no puedes verte las uñas sin pintar, seguramente te habrás enfrentado al drama de tener que quitarte la manicura semipermanente o las uñas acrílicas en casa. Y ahora te toca hacerte la manicura tú misma, cosa que no es tan fácil como parece.
Para que consigas un resultado casi profesional (o simplemente para evitar un desastre), hemos recopilado los 7 errores más comunes que cometemos al hacernos la manicura y la solución a cada uno de ellos. Toma nota y sigue estos consejos paso a paso en tu próxima sesión de manicura y te quedarán uñas de 10.
1. No sumergir las uñas primero
Si no sumerges tus uñas en agua antes de pintarlas harás que se vuelvan más quebradizas y se resequen. Es importante dejar en remojo las manos en un recipiente con agua tibia durante al menos 15 minutos antes de comenzar con el proceso.
2. Pasar repetidas veces el algodón para retirar el esmalte
2. Pasar repetidas veces el algodón para retirar el esmalte
El primer paso de tu manicura es eliminar los restos de esmalte. Un error muy frecuente es el de pasar repetidas veces el algodón por la uña para retirar el esmalte. Lo que tienes que hacer para que la pintura se retire con facilidad es impregnar bien el algodón en acetona y déjalo reposar encima de la uña al menos 20 segundos. Es mucho más efectivo y después de hacerlo, podrás retirarlo con una suave pasada.
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3. Utilizar la lima a lo loco
Uno de los errores más comunes (y más graves) es utilizar mal la lima de uñas. Tienes que evitar limar la uña en ambas direcciones (realiza movimientos en una sola dirección para no resquebrajar tu uña) y no limes las uñas en exceso porque las dejarás demasiado finas y frágiles.
4. Cortar las cutículas
4. Cortar las cutículas
Es muy importante que no cortes tus cutículas, solo tienes que aplicar aceite nutritivo para reblandecerlas y empujarlas hacia atrás con ayuda de un palito de naranjo o similar.
5. No aplicar una capa de base
Un gran error es no preparar la uña antes de aplicar el esmalte con un esmalte base o de brillo transparente. De este modo, puedes prevenir que la uña se tiña y también que el esmalte te dure más.
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6. No aplicar correctamente el esmalte
A la hora de aplicar el esmalte es muy importante que des 2 o 3 capas de producto para conseguir un color uniforme. Pero, ojo, estas capas deben ser muy finas para que se sequen rápido y no se formen huecos de aire que puedan estropear la manicura.
7. No sellar la punta
En cada capa de esmalte que apliques, te aconsejamos sellar el borde de la uña para evitar que se estropeen al utilizar el teclado del ordenador o realizar tareas cotidianas como fregar los platos.
