Hoy en día, el GPS se ha vuelto una herramienta invaluable para ubicarnos y guiarnos hacia nuestro destino. No obstante, no siempre nos indica la mejor ruta y puede cometer errores sobre el camino correcto a seguir, por lo que en ocasiones es necesario recurrir al sentido común para decidir por qué calles debemos transitar.
No obstante, la lógica puede fallar cuando somos turistas y desconocemos el área, dejándonos totalmente a merced del GPS. Esto puede resultar contraproducente, como le sucedió al propietario de un auto que, siguiendo las indicaciones del sistema de navegación satelital, terminó atrapado en un callejón en Guerrero, México.
La historia del vehículo atorado fue compartida por Teresa Mendoza, quien publicó en Twitter fotos del incidente con una explicación sobre lo ocurrido en las calles del Barrio de Casahuates en Taxco, Guerrero.
Un grupo de turistas, originarios de Morelos, quedó atrapado al intentar pasar con su auto por un estrecho callejón, «por culpa del GPS», en el Barrio de Casahuates, Taxco, Guerrero.
¿Qué opinan ustedes? ¿Fue culpa del GPS o de… otra cosa?
🫣 pic.twitter.com/e3nLKIoG21
— Teresa Mendoza 💜 (@MaTere_Mendoza) 22 de mayo de 2022
Estos turistas de Morelos decidieron explorar un poco la ciudad en su auto particular, pero, debido al GPS, se vieron atrapados al intentar atravesar un callejón.
Las imágenes del auto negro atrapado entre las paredes del callejón se hicieron virales rápidamente en redes sociales, donde los usuarios no tardaron en comentar. Algunos coincidieron en que Taxco es un verdadero laberinto para los turistas, mientras que otros argumentaron que la responsabilidad recaía en el conductor del vehículo.
Las reacciones y comentarios sobre este curioso incidente resultaron bastante graciosos, así que hemos recopilado los mejores para compartirlos contigo en la siguiente lista.
1. Habría sido de gran ayuda
2. Así llegas a tu destino
3. Solo faltó el lago
Este es el lago.
La máquina lo sabe.
Este es el lago.
4. No lo dudo
5. Les gusta recrear escenas
– No vamos a caber ahí.
– ¡Conozco este coche!