¿Invertirías todos tus ahorros en una casa embrujada? Seguramente la respuesta sería “no”, pero Jacqueline Nuñez, una apasionada del terror, decidió gastar hasta su último centavo en la casa que inspiró la película El conjuro.
Según informa The Boston Globe, Nuñez adquirió la vivienda por más de 1.5 millones de dólares, ubicada en el número 1677 de Round Top Road en Burrillville, Rhode Island, Estados Unidos.
Aunque ninguna de las películas de la trilogía de terror se filmó en esta casa, se dice que el lugar formó parte de las investigaciones paranormales llevadas a cabo por Ed y Lorraine Warren. De hecho, la investigación en esa propiedad fue la inspiración para la película El conjuro de 2013.
Antes de que Nuñez se convirtiera en su propietaria, la casa perteneció a Jennifer y Cory Heinzen, quienes desde 2019 aprovecharon su conexión con los Warren. Sin embargo, los Heinzen vendieron la propiedad debido a la dificultad de gestionar un negocio de semejante tipo.
La propiedad, que fue adquirida por la suma de 1.5 millones de dólares, data de alrededor de 1736 y tiene una extensión de 947.62 metros cuadrados. Por otro lado, Nuñez ha afirmado que este es su mejor compra y planea continuar con las investigaciones paranormales.
“Esta compra es muy personal para mí. No es un desarrollo inmobiliario. Es una expresión de mis propias creencias. Soy una persona profundamente espiritual. Es fundamental en mi vida. (…) Esta casa representa una oportunidad para conectarse con aquellos que han fallecido; esa es la interactividad y el compromiso con las almas que se han ido.»
A pesar de que muchos temen entrar en la casa, que supuestamente está dominada por la entidad de Bathsheba Sherman, una satanista del siglo XIX, Nuñez afirma no sentir ningún tipo de temor.
“No creo que la energía aquí sea malévola. Habrá cosas que me sorprenderán, pero no me harán daño. Espero experimentar algo.”
