Luego del lanzamiento del nuevo espectáculo SuperNature del comediante Ricky Gervais en Netflix, varios empleados de la plataforma de streaming manifestaron su descontento por los temas que aborda el especial y el tipo de humor que utiliza. Después de expresar su desacuerdo, renunciaron a sus puestos, y el CEO de Netflix salió en defensa del comediante.
En el nuevo show, Gervais aborda temas políticamente incorrectos, ya que no se contiene en sus chistes sobre la comunidad LGBT, la disforia de género de los trans y otros temas delicados que podrían conllevar a una cancelación cultural.
No obstante, el programa estableció récords de visualización, y los expertos opinan que tales contenidos generan ingresos para la plataforma de streaming. Por esta razón, la compañía, a pesar de su agenda progresista, ha decidido respaldar a Gervais e ignorar el descontento de sus ahora exempleados y de quienes se sumen a las críticas.
Hace unos meses ocurrió algo similar con el especial The Closer, de Dave Chappelle, quien emitió chistes sin filtros en contra de los progresistas. Esto provocó que los trabajadores realizaran una huelga de 24 horas, pero el CEO de la empresa, Ted Sarandos, demostró su apoyo al comediante.
Considero que es fundamental para la cultura estadounidense, en general, tener libertad de expresión. Estamos presentando shows para un público diverso que tiene opiniones, gustos y estilos diferentes, y, sin embargo, no podemos complacernos a todos. Queremos ofrecer algo para todos, pero no todo será adecuado para todos.
Después de que el nuevo modelo de negocio adoptado por Netflix causara una disminución en las suscripciones, Sarandos reconoció que han cometido errores significativos, pero que las personas inconformes con el punto de vista de los comediantes son las únicas que tienen algo que decir. A pesar de que la compañía atraviesa una crisis financiera, la junta directiva decidió mantener las tramas más exitosas, independientemente de si son progresistas o no.
