Según expertos, las temperaturas extremas que afectan el Ártico están provocando un deshielo cuatro veces más rápido de lo que se había registrado en años anteriores. En Groenlandia, el deshielo se manifiesta en ríos de agua que fluyen hacia el océano. Las temperaturas alcanzan los 15.6 grados centígrados, que son 10 grados superiores a lo habitual para esta época del año.
Según datos del Centro Nacional de Nieve y Hielo de la Universidad de Colorado, Estados Unidos, solo el hielo derretido en Groenlandia entre el 15 y el 17 de julio (6,000 millones de toneladas de agua al día) podría llenar 7.2 millones de piscinas olímpicas.
El deshielo en el norte la semana pasada es anómalo si se considera el promedio climático de los últimos 30 a 40 años. Este fenómeno ha ido en aumento y el reciente evento representa un pico significativo.
Sin duda, eso me preocupa. Ayer pudimos salir usando camisetas, lo cual no era realmente lo que esperábamos.
– Ted Scambos, investigador senior del Centro Nacional de Datos de Nieve y Hielo de la Universidad de Colorado
Los científicos afirman que las tasas de derretimiento en Groenlandia son “sin precedentes” y las enormes cantidades de agua de deshielo que emergen en la superficie solo agravan la situación, ya que aceleran la pérdida de hielo.
En 2020, investigadores de la Universidad Estatal de Ohio señalaron que el deshielo de los últimos años supera todo lo que Groenlandia ha experimentado en los últimos 12,000 años en términos de cambios climáticos. También advirtieron que si la superficie de Groenlandia se derritiera por completo, el nivel del mar aumentaría en 7.5 metros a nivel global, causando catástrofes naturales y alterando visiblemente el campo gravitacional sobre Groenlandia.
Grupos ecologistas advierten que el deshielo podría llevar a la extinción de varias especies animales, desencadenando un cambio irreversible en la cadena alimentaria y en los patrones climáticos.
