Experimentar un robo es, sin duda, una de las vivencias más angustiosas que una persona puede atravesar. Aunque con el tiempo algunas personas pueden asimilarlo, para otros se trata de un trauma que resulta difícil de superar, especialmente si el delincuente portaba un arma, ya sea blanca o de fuego.
No obstante, dependiendo de las circunstancias, hay quienes recuerdan este evento como el momento más doloroso de su vida, mientras que otros lo ven como una anécdota divertida. Un ejemplo es esta chica que se volvió viral al narrar el reencuentro que tuvo con su asaltante 10 años después del robo.
La mujer que cuenta su historia de una forma amena es Lupita Villalobos, quien a través de un storytime en TikTok, compartió en dos partes la experiencia en la que se encontró con el chico que la asaltó cuando era estudiante de preparatoria.
Al dar contexto sobre por qué relata este acontecimiento, Lupita menciona que lo recordó porque su gatita Ximena la rasguñó, y al no usar crema, tenía el brazo reseco, similar a como ella llamaba “El piel reseca”, apodo que le dio a su asaltante.
https://youtu.be/U0QS4s40g5Q
Según lo que relató Lupita, el robo sucedió en la ciudad de Hermosillo, en el estado de Sonora, México. Ella y sus amigos de la preparatoria se encontraban en el Cerro de la Campana para un trabajo escolar, cuando fueron abordados por varios delincuentes.
Cuando uno de los asaltantes le pidió a la tiktoker que entregara sus pertenencias, ella no pudo evitar notar que el chico no llevaba camisa y que tenía la piel seca, lo cual le llamó mucho la atención.
Después del robo, Lupita se sintió extremadamente nerviosa, lo que le hizo casi imposible bajar del cerro. Esta situación la llevó a pedir ayuda a su asaltante, quien al tomarle la mano, mostró una quemadura entre el dedo pulgar y el índice, un detalle que ella nunca olvidó.
Pasados 10 años desde aquel incidente, Lupita se encontró nuevamente con su asaltante, esta vez en la caja de un supermercado, donde lo reconoció gracias a la quemadura en su mano.
Al cerciorarse de que realmente era su asaltante, la mujer decidió no quedarse con la duda y lo confrontó, preguntándole si anteriormente se dedicaba a robar, a lo que el joven, avergonzado, confirmó que sí.
Luego de rememorar juntos el asalto, Alejandro, como se llama el asaltante, le comentó a Lupita que estuvo en prisión, pero que ahora tiene tres años trabajando en el centro comercial y es padre de una niña, incluso le mostró algunas fotos.
La singular y extraña historia de la joven rápidamente se volvió popular en redes sociales, donde los usuarios no solo se sorprendieron por la forma en que Lupita lo gestionó, sino que también se divirtieron con la manera en que lo narró.
