El impresionante supertelescopio espacial James Webb nos vuelve a cautivar con increíbles nuevas imágenes. En esta ocasión, la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) ha presentado a Júpiter de una manera totalmente inédita.
El 22 de agosto, la agencia espacial reveló espectaculares imágenes del planeta más grande del sistema solar. Estas fotografías, tomadas el 27 de julio, muestran a Júpiter rodeado de auroras boreales y luces del sur en sus dos polos, así como neblina polar arremolinada, inmensas tormentas, vientos intensos, auroras y condiciones extremas.
También se pueden observar sus anillos, que emiten una débil luminosidad, así como dos de sus lunas, Amaltea y Adrastea. La NASA compartió estas imágenes inéditas a través de sus redes sociales, y según Imke de Pater, profesora emérita de la Universidad de California y Coordinadora de Observaciones, la calidad de las imágenes superó las expectativas iniciales.
Nunca hemos visto a Júpiter de esta forma. Todo esto es verdaderamente asombroso.
De acuerdo con el comunicado publicado en el sitio de la NASA, las imágenes de Júpiter fueron obtenidas gracias a la NIRCam (cámara de infrarrojo cercano), que posee tres filtros infrarrojos específicos que permiten revelar detalles del planeta.
La luz infrarroja es invisible al ojo humano, por lo que los científicos, en colaboración con la experta Judy Schmidt, “tradujeron” estos datos a las longitudes de onda del espectro visible para crear las imágenes.
En términos generales, las longitudes de onda más largas se ven más rojas, mientras que las más cortas lucen más azules. En una vista de amplio rango (creada con dos filtros), Júpiter se muestra con sus sutiles anillos y las dos pequeñas lunas Amaltea y Adrastea.
Además, se pueden observar algunos puntos borrosos de fondo que, según la agencia espacial, probablemente sean “galaxias distantes capturadas en esta instantánea”. En la imagen de “primer plano”, obtenida de la misma manera que las restantes, las auroras que se elevan por encima de los polos norte y sur de Júpiter son claramente visibles gracias a un filtro que resalta las longitudes de onda más largas en tonos rojos.
Además, la luz reflejada de las nubes bajas y las nieblas altas resalta en la imagen. Otro filtro, “asignado” a los tonos amarillos y verdes, revela las nieblas que giran alrededor de los polos.
Por último, un tercer filtro en tonos azules (longitudes de onda más cortas) muestra la luz reflejada desde una nube principal más profunda. La Gran Mancha Roja, una tormenta tan extensa que podría tragar a la Tierra, se presenta en blanco en estas imágenes, al igual que otras nubes, por la gran cantidad de luz solar que reflejan.