Grace Stanke, estudiante de Ingeniería Nuclear en Wisconsin, Estados Unidos, impresionó tanto al jurado como al público de Miss Estados Unidos con su belleza y su amplio conocimiento sobre temas políticos, sociales y medioambientales.
La joven de 20 años logró hacerse con la corona ante la mirada de todos los presentes, sirviendo de inspiración para que otras jóvenes persigan sus sueños sin importar las opiniones ajenas.
Grace estudia Ingeniería Nuclear en la Universidad de Wisconsin-Madison, donde también crea contenido informativo para redes sociales y cada vez que puede, anima a otras chicas a seguir sus objetivos.
“Estoy muy orgullosa de ser una mujer en el ámbito de la ingeniería nuclear. No es un camino sencillo ni fácil de recorrer, pero la recompensa vale mucho la pena”, expresa.
“A la joven mujer, a la pequeña niña, a la estudiante que sueña con ser ingeniera pero enfrenta obstáculos por diversas razones: recuerden que ustedes son pioneras en este ámbito. Quiero ser un modelo a seguir que inspire a otras a hacer lo mismo y a tomar decisiones valientes. Quiero ser una persona que promueva el cambio en los demás”, añade Grace.
No obstante, Grace ha comentado que tras recibir la corona, su vida dio un giro completo y no necesariamente para mejor. Antes se consideraba una joven nerd y poco popular, con dificultades para conseguir citas y siendo criticada por su forma de vestir. Aunque el jurado reconoció su belleza, esto trajo consigo otros retos, ya que sus compañeros de clase y trabajo empezaron a calificarla como una chica “hueca” que solo aprovechaba su físico.
Afortunadamente, Grace ha sabido gestionar la situación, ignorando los comentarios negativos y demostrando que la inteligencia y la belleza pueden coexistir.
Grace ha demostrado ser una persona talentosa en diversas áreas, exhibiendo sus conocimientos en ecología y cambio climático. Además, es una excelente violinista desde los ocho años.
Por ahora, la joven ha tomado la decisión de continuar con sus estudios y usar su voz para sensibilizar a la sociedad sobre problemas relevantes, convirtiéndose en un ejemplo a seguir para futuras generaciones.