A pesar de que las tecnologías modernas han mejorado nuestra calidad de vida, no siempre funcionan de la manera esperada. Un claro ejemplo es el GPS; que, aunque es un salvavidas para los que se sienten perdidos, a veces actúa de forma descontrolada y es mejor confiar en nuestras limitadas habilidades de exploración, al estilo de Dora.
Un caso más en el cual la tecnología no da en el clavo es el de los filtros, muy populares en plataformas como Instagram y TikTok. De hecho, en este último se volvió viral un filtro que transforma fotos en versiones de anime, aunque no todos los resultados son acertados. A continuación, te mostramos algunas de las hilarantes pruebas de este fiasco.