En noviembre de 2020, la reconocida periodista y presentadora de televisión mexicana Lolita Ayala presentó una línea de ropa con su imagen y, en octubre de 2022, le obsequió una sudadera a la célebre actriz Jamie Lee Curtis durante su visita a México. Sin embargo, recientemente fue vista en una silla de ruedas y con oxígeno, lo que sorprendió a los televidentes, quienes manifestaron su preocupación por la salud de la comentarista de 71 años.
El breve encuentro en que Lolita apareció ante las cámaras tuvo lugar en el aeropuerto de la ciudad, donde admitió que su actual condición es resultado de las secuelas del grave accidente de helicóptero que sufrió hace siete años. Además, ante la inquietud por su estado de salud, una amiga cercana a la expresentadora de noticias reveló que, además de su mal estado físico, la periodista también enfrenta dificultades económicas.
Las declaraciones de la fuente cercana a Lolita Ayala fueron publicadas en la revista TVNotas, lo que ha alarmado a los seguidores de la exconductora de noticias de Televisa, pues parece que no está atravesando su mejor momento. La amiga de la periodista mexicana aseguró que no puede caminar con normalidad a pesar de haberse sometido a varias cirugías, y que incluso en una ocasión se cayó en casa, fracturándose el fémur y la cadera.
Ante estas complicaciones que le impiden moverse con facilidad y sumadas al lento proceso de rehabilitación, la conductora de televisión se ha visto afectada emocionalmente, cayendo en episodios de depresión, dado que siempre ha sido una mujer muy activa. La impotencia y los intensos dolores que sufre la llevan a llorar.
Además de los problemas de salud, Lolita Ayala enfrenta serias dificultades económicas, habiendo gastado considerablemente en las cirugías de su columna, cadera y fémur, así como en tratamientos de rehabilitación y medicamentos. Aunque cuenta con un seguro de gastos médicos mayores, este plan no cubre la totalidad de sus necesidades de salud.
Después de los altos costos en los que ha incurrido por su atención médica, la mexicana de 71 años está viviendo una crisis financiera, tanto a nivel personal como en su fundación Sólo por ayudar, que no ha podido recaudar donativos desde la pandemia y ha enfrentado problemas legales relacionados con impuestos y gastos, lo que la ha llevado a considerar el cierre definitivo de la fundación.
Las cosas tampoco parecen mejorar en su tienda de ropa virtual, que ha permanecido cerrada desde el 23 de diciembre. Los seguidores asumieron que la pausa se debía a las vacaciones de invierno, pero parece que la realidad es otra, ya que las ventas han disminuido y planean reabrir con una nueva estrategia.
Las complicaciones económicas en sus negocios, en la fundación y, sobre todo, los problemas de salud derivados de su columna rota y el uso de oxígeno debido a su hipertensión, ponen a Lolita Ayala en una situación muy complicada. Tanto su amiga como muchas personas que la aprecian esperan que pronto encuentre soluciones para que pueda seguir ayudando a los demás y mantenerse activa, como le gusta.
