Es muy probable que en tu infancia hayas pertenecido al grupo de aquellos que «hablan mucho en clase», y no lo decimos con el ánimo de criticar, sino todo lo contrario, te entendemos perfectamente porque nosotras también formamos parte de ese equipo.
No obstante, debemos mencionar que los métodos utilizados por las maestras para lograr que nos calláramos no siempre eran efectivos. Aun así, nunca tuvimos el valor de responder como lo hizo un pequeño alumno de España a su maestra, quien pensó que podría mantenerlo en silencio simplemente cambiándolo de lugar.
Tal vez, la profesora pensó que la solución ideal para que el protagonista de esta anécdota prestara atención era moverlo de lugar. Sin embargo, el niño le hizo saber, de manera muy cortés, que eso no cambiaría nada.
La maestra Ana Ann compartió en Twitter la carta de Iker, un alumno de tan solo nueve años, quien se dio cuenta de que su maestra lo había cambiado de lugar para evitar que hablara en clase, así que decidió escribirle una carta aclaratoria.
Querida profe: Yo hablo con todos, cambiarme de sitio no funcionará. Iker.
Por supuesto, esta carta provocó una risa en su maestra, no solo por la ocurrencia del niño, sino por la sinceridad que mostró en su nota. Por eso decidió compartirla en su cuenta de Twitter, donde no tardaron en llegar los comentarios de los usuarios, muchos de los cuales coincidieron en que Iker tiene un futuro prometedor, aunque será necesario guiarlo para que utilice esa capacidad en cosas positivas.
Las reacciones a esta publicación reflejan la simpatía que generó la carta del pequeño Iker. Suponemos que la maestra tendrá que idear una nueva estrategia para lograr que este niño, al menos, no hable tanto.
