A pesar de que desde su infancia se convirtió en una de las celebridades más reconocidas y famosas gracias a su papel como Hermione Granger en la saga de películas de Harry Potter, Emma Watson también ha participado en otras producciones exitosas como Las ventajas de ser invisible, La bella y la bestia, y su más reciente proyecto, Mujercitas, con el que decidió alejarse de la actuación, desapareciendo así del panorama del entretenimiento.
Luego de sorprender a todos al distanciarse de la fama y de su carrera como actriz, la modelo y activista británica de 33 años comenzó a invertir en empresas, en su mayoría lideradas por mujeres. Sin embargo, fue la presentación de una nueva ginebra premium lanzada por su hermano menor lo que la hizo regresar al ojo público.
Después de cinco años de su última aparición en la industria del cine y tras el reciente lanzamiento de la ginebra Renais, creada por su hermano Alex Watson, la estrella de La bella y la bestia otorgó una entrevista al medio Financial Times, donde compartió detalles sobre las razones que la llevaron a apartarse del mundo del espectáculo.
Según Watson, su distanciamiento de las cámaras fue consecuencia de un cambio profundo en su vida, ya que se sentía infeliz y, hasta cierto punto, atrapada en un entorno en el que sentía que no podía controlar lo que sucedía. Relató que era complicado estar al frente de una película mientras los periodistas le hacían preguntas sobre proyectos en los que no había participado.
No era feliz, para ser honesta. Sentí que estaba atrapada. Me resultaba difícil vender algo sobre lo que no tenía mucho control. Tener que ser el rostro y la portavoz de proyectos en los que no pude participar en el proceso resultaba complicado.
La presión mediática para que se expresara sobre temas con los que no tenía relación fue tan frustrante que la llevó a sentirse acorralada. Al darse cuenta de que solo se enfrentaba a personas que la criticarían y juzgarían hasta el punto de hacerla odiarse a sí misma, eligió alejarse y tomarse un descanso de la actuación.
Me hicieron responsable de una manera que me resultaba realmente frustrante, porque no tenía voz ni nada que decir. Comencé a darme cuenta de que solo quería estar en proyectos en los que, si alguien me iba a criticar, fuera de una manera que no me hiciera odiarme a mí misma, diciéndome: ‘Sí, lo arruiné. Fue mi decisión y debería haberlo hecho mejor.
Aunque en la actualidad se siente muy feliz e involucrada con su empresa familiar, apoyando a su hermano en la imagen, diseño y dirección de arte de su nueva ginebra, Emma no descarta la posibilidad de regresar a la actuación, pero asegura que está a la espera de una propuesta diferente que considere adecuada para retomar su carrera como actriz.